Más de 20 personas forman parte del espacio terapéutico en el que mediante el oficio se elaboran numerosos productos panificados, a la vez que se fomentan hábitos, conductas y valores.
En el Hospital de Salud Mental y Adicciones Papa Francisco de Belén de Escobar, más de 20 concurrentes asisten al taller de panadería y pastelería que se desarrolla una vez por semana y tiene como objetivo capacitar a los participantes para brindarles herramientas laborales.
Los productos que se elaboran en el taller son panes, tortas, bizcochuelos, pepas, sándwiches de miga, masas secas y pasta frola, entre otros, y se destinan al consumo interno, al Hogar de Ancianas Eva Perón y en algunas ocasiones al catering de eventos municipales, donde los cocineros se desempeñan como camareros.
Este año, gracias a la capacitación y a la experiencia que obtuvieron en el taller de panadería y pastelería, dos concurrentes del Hospital Papa Francisco que fueron dados de alta comenzaron a trabajar como pasteleros en la Espiga de Oro de Ingeniero Maschwitz. Estas dos personas continúan concurriendo dos veces por semana al hospital para participar de la terapia grupal y de la individual, con el objetivo de fortalecer la recuperación.
De esta manera, la Municipalidad de Escobar continúa con sus políticas de salud que no sólo abordan la salud desde el concepto de la enfermedad sino desde una visión integral que apunta a la prevención y, como en este caso, a la inserción social de las personas rehabilitadas.
